miércoles, 20 de agosto de 2008

Reflexión de vacaciones...


Hola amigos/as:
Uno de los libros que me he leído en este verano ha sido “Oriente y Occidente” de Luís Racionero. En él hace una comparativa y al mismo tiempo crítica entre las culturas orientales y occidentales. Remarca la orientalización que Occidente está llevando a cabo y la occidentalización que Oriente se está auto imponiendo.
No defiende un modelo a seguir, pero intenta buscar un punto de consenso, ni uno ni el otro. Mientras Occidente intenta ir hacia un progreso ecológico sin renunciar a ello los “logros” obtenidos, Oriente se ha despertado e intenta crear en su sociedad de respeto hacia la naturaleza y orígenes los valores de Occidente.
Todo esto me ha venido a la cabeza después de leer la entrevista final que hacen cada día en “El Periódico” dónde en el de hoy, entrevistan a una filósofa que defiende el modelo de las vacaciones como el “DOLCE FAR NIENTE”, dónde sugiere que las vacaciones que hacemos hoy en día no son vacaciones pues intentamos concentrar en ellas todo lo que deseamos y nos excusamos durante el resto del año.
Sugiere que en el día a día, nos tomemos un tiempo para reflexionar, un tiempo para contemplar, un tiempo en definitiva para estar con nosotros mismos.
También me ha venido a la cabeza escribiros sobre el tema, pues una cosa que me llamó la atención sobre el mencionado libro, es que en Occidente somos incapaces de estar dos minutos sin hacer nada. Dos minutos son ciento veinte segundos, es decir, un breve espacio de tiempo, que si lo intentamos, observaremos que se nos hace eterno. Estamos tan habituados a hacer algo, que nos resulta del todo imposible no hacer nada, no pensar en nada, no escucharnos, no escuchar la naturaleza… Y si no nos escuchamos ni a nosotros mismos, como diantre pretendemos escuchar tan siquiera a nuestra pareja, amigo/a, hijo/a… Probadlo y ya me diréis, no es perder el tiempo os lo aseguro.
Tanto en el libro como en la entrevista, comenta sobre el placer de recuperar la siesta, el arte de la conversación, la espiritualidad perdida por la religión judío – cristiana en Occidente, ensalza volver a los orígenes de la antiguas civilizaciones mediterráneas; mientras que en Oriente estas costumbres tan propias y típicas están cediendo el paso hacia el consumismo que en Occidente hartos empezamos a estar.
Para que haya movimiento no debe haber movimiento. En Yoga se llama el “vacío”, debes vaciarte para poder llenarte. Y se consigue estando simplemente en silencio y sin hacer nada.
Cuando uno consigue no pensar en nada, no hacer nada, tiene más tiempo para ordenar y empezar, pero en ésta sociedad dónde no hacer nada ni tan siquiera es contemplado, aquellos que tenemos tiempo para nosotros, aquellos que vemos y nos hemos dado cuenta de que la fama obtenida por el dinero es efímera, nos damos cuenta de que la riqueza interior, no es efímera, es verdadera y perdura en el tiempo.
Seguramente para algunos seré un completo estúpido, pero no les quito la razón, para mí ellos no son estúpidos, son tan pobres que solo tienen dinero. Y como dice aquel dicho: el dinero puede comprar amigos pero no la amistad; el dinero puede comprar sexo pero no el amor, el dinero puede comprar medicamentos pero no la salud; el dinero no puede comprar ni tan siquiera un campo de Golf para jugar con los amigos por mucho dinero que creas tener… A veces sin dinero se consiguen grandes cosas, por ejemplo, ser mejor contigo mismo para ser mejor con los demás.
En fin, un poco de filosofía para aquellos que aún estéis de vacaciones puede que ayude a replantearos un tiempo para vosotros. Aunque supongo que habrá aquellos que suelten la excusa del trabajo, los niños… Un libro es una buena compañía hasta para un niño y debemos de hacerles entender que es bueno saber buscarse sus propios recursos en lugar de dárselos…
Un abrazo
TONI

1 comentario:

Anónimo dijo...

Después de mas de 8 años de karate el único golpe que no he conseguido asumir es el conocimiento de su muerte cuando iba a inscribir a mis hijos.