Por el móvil...

Hola amigos/as:
Ayer por la noche daba buena cuenta de unas gambas a la plancha con Juan, mientras sus hijos Diego y Paola daban también buena cuenta de unas ricas hamburguesas pues no les gustan las gambas, a esa edad es normal y yo se lo agradezco, pues ya me veía pelando mas gambas para ellos que para mí (que por otra parte encantado de hacerlo), resulta que alguien insistía en hablar conmigo y mi móvil (ese “invento” que parece ser nadie recuerda ya cuando no existía la tranquilidad que nos aportaba el no poseerlo) no paraba de sonar.
Evidentemente me enteré pasada la cena y cuando descubrí que el que intentaba comunicarse conmigo no era otra persona humana que mi querido amigo Olaf “que pasa tronco” (le dijo a uno que le habían amputado piernas y brazos), pues eso, llamé a su casa de Barcelona y su preciosa mujer Montserrat me comunicó que estaba en la bella ciudad de León y que se había llevado el móvil, si queridos lectores y amigos/as, Olaf es poseedor de un teléfono móvil regalo de su bella mujer. Tuve que colgar pues me realizaba la llamada número cinco (por ahí te la hinco).
No me lo podía creer, hablando con Olaf por el móvil y encima desde León. La última vez que hablé con él estaba en el WC haciendo de vientre, él es así. Pues eso que estaba con un grupo de amigos leoneses y me dice: “amigo eres más conocido en mi tierra que yo mismo mismamente”; y eso que en León he estado dos veces. Lo que sucede es que en los Touring Rides de Harley Davidson, los ángeles de la guarda y los que hacen las previas son de León, y uno que se hace querer sin pedírselo mucho, pues eso, que estaba de vinos y sidras. Durante esa animada conversación y conforme la exaltación del alcohol exalta también el amor y la amistad, se pusieron a hablar de amigos comunes y dado que estaba la “rubia” decidieron en el furor etílico llamarme para mandarme un saludo, un abrazo y de paso reírnos un poco. Besos y abrazos telefónicos con ganas de volver a verlos pues puede que me apunte a las previas del año que viene a cambio de cama, bebida y comida, pues compartir con Santos, Enrique y la “rubia” unos días preparando el próximo evento Harley debe ser un placer.
Esta mañana me he enterado que JL (foto) no estaba en un buen momento. Amigo nuevo que somos, pues es de esas personas que el haber rodado unos kilómetros juntos hace que sea una gozada estar con él (espero y deseo que te produzca el mismo placer no sodomita que a mí), lo he llamado para estar y ver en que puedo ayudar. Resulta que PROPER un amigo de él y conocido mío estaba siendo operado de urgencias por un cáncer de vejiga. Justo ahora que habían decidido irse a un terreno en Alicante con sendas casas al más puro estilo del lejano y salvaje Oeste (casa de madera) y vivir para viajar, teniendo como lugar de descanso ese paraíso.
Tranquilo amigo, rodaremos de nuevo juntos y rodarás siempre con él, pues aunque no deseemos que pase lo peor, si sucede mi hombro presto para llorar tendrás y Blanquita te acompañará si es necesario unos kilómetros. Y como no me gusta ser pesimista, pues soy bastante optimista, desde aquí le doy ánimos a aquellos que se sientan preocupados, aunque JL es de los que se ocupan, pues estaba junto a ellos ayudándoles, que es como realmente se ayuda: ocupándote y no preocupándote. Ánimo JL, se fuerte y si me necesitas aquí estoy.
Un consejo, si tienes sucio el móvil, no lo pongas en la lavadora pues se estropea y luego pasa lo que pasa, que pierdes los números que tenías y no reconoces al que te llama y queda muy feo preguntar quién eres cuando es un amigo el que llama, aunque me has reconocido a la primera. Ánimo…
Un abrazo

TONI