Que le vamos a hacer...

Hola amigos:
Seguimos de campaña electoral, pero hay otras noticias que ocupan también el quehacer informativo de nuestros días.
A reseñar la suplica que ha realizado un tal Wolfowitz, si el señor director del Banco Mundial que por la cara bonita de su novia (y mira que el tío es feo) le sube el sueldo (siempre he dicho que gobernar una empresa con el dinero de los demás y si encima es el Banco Mundial dónde todos metemos dinero menos ellos, pues eso, que aún es más fácil de hacer lo que a uno le venga en gana). Yo supongo que aparte de por la cara habrá sido también por el culo, pues solo un hombre es tan imbécil (y ahí se demuestra la teoría de que las mujeres piensan que solo tenemos una neurona y se encuentra entre las piernas) de acometer semejante acto por un culo femenino. Ah, si en vez de director fuese directora, en vez de subirle el sueldo al querido lo despedía como le viniese con remilgos de: “hoy no que me duele la cabeza”, “no me apetece que horades mi cerito sexual” y otros mas que los sufridos hombres conocemos bien (y vosotras también, que puñetas).
Pues resulta que encima de reconocerlo, se niega a abandonar el sillón y ha suplicado al Consejo que le respeten en el cargo a cambio de realizar y acometer importantes cambios en su estilo de gestión. Seamos claros: les ha dicho que el sueldo se lo sube ahora a ellos sin intercambio de favores sexuales. Y nosotros felices porqué la Pantoja no está en la cárcel.
Otra preocupante: hay unos holandeses en Girona estudiando la posibilidad de hacer desaparecer el mal olor de las granjas de cerdos. Para ello pretenden crear un gran ambientador (que no es musical) para eliminar ese olor. Vamos a ver, los cerdos huelen mal y eso es de toda la vida de Dios, a que carajo vienen estos aquí. Un cerdo es un cerdo y debe oler mal para que salga buen jamón. A este paso cuando vayamos por el campo ya ni eso oleremos y entonces tendremos un anuncio en la TV que en vez de preguntarnos a que huelen las nubes, nos preguntarán a que huelen los cerdos.
Estos holandeses se podrían quedar cultivando amapolas e idear otras cosas para la mejora del medio ambiente que no la de suprimir el olor de los cerdos… Que si seguimos así, llegará un día que los niños cuando estén cerca de un cerdo creerán que es un caramelo de fresa (pues como el cerdo es rosa, pues eso, que a lo mejor relacionan color con olor y sabor).
Anuncio político: estos de IU nos toman por tontos y para muestra un botón. Van de ecologistas y encima de izquierdas. Pues en el anuncio de la mujer del sonrisitasSaura para la Alcaldía de BCN, aparte de estar rodeada de un montón de papeles (venga con la tala indiscriminada de árboles) sale con una cazadora de cuero y encima roja. Sal en pelotas, ganarías más. Un ecologista que lleva una cazadora de piel (y con lo que cobra esta seguro que de cordero no es) y encima teñida (que yo sepa no hay piel de animales roja).
Y si vemos el de Llamazares, si ese que sale un tío por la mañana en casa escuchando la radio y cambia a JLO por el discurso radiofónico del tipo, dando señas de cómo no malgastar agua al cepillarse los dientes, hablando de viviendas dignas (los mismos que propusieron como vivienda digna una de aproximadamente 50 metros), potenciar los recursos naturales, mostrando una pareja de mediana edad en actitud cariñosa (y a él la tienda de campaña marinera en sus pantalones brillando por su ausencia), hablando de igualdad… Hay que verlo.
Supongo que el siguiente eslogan político será: “l tamaño no importa y el dinero no trae la felicidad” (que de seguro esta cita es de autor desconocido, pobre y de polla pequeña).
En fín, como decía aquel amigo mío: “ADEAMUS AD MENTAM FADERE PUTAS CUM PARRIBUS NOSTRUM” que viene a decir lo siguiente: vamos al monte a plantar patatas con nuestras azadas (que si hubieseis estudiado latín no pensaríais gilipolleces).
Un abrazo, pues hasta aquí llego hoy. Mañana más, mejor será imposible pero lo intentaré.

TONI